Daniel Berdichevsky: «Las redes deben ser capaces de responder a la gente»
El cofundador del Laboratorio de Tecnologías Persuasivas de la Universidad de Stanford y «padre de la captología» visito Chile en su calidad de profesor visitante internacional del Magíster en Gestión de Comunidades Digitales (Community Management) dictado por el Observatorio Iberoamericano de Comunicaciones Digitales y la Universidad del Pacífico. En ella, entregó a los alumnos «pistas» para utilizar las redes sociales de manera persuasiva y lograr efectividad en las estrategias comunicacionales a través de la red.
El autor del libro «La Psicología del Facebook» explicó que una de las premisas fundamentales para que las compañías o marcas tengan alguna retroalimentación de sus seguidores es, principalmente, la interacción.
«Las marcas deben tener planificaciones con consistencia. Una empresa o hasta persona no puede tener un sitio sin actividad. No puede ser una máquina, tiene que tener personalidad y tiene que ser capaz de responder a la gente. Hay fan pages que tienen mucho regalo y muy poca interacción», explicó académico de la Universidad de Stanford.
– En Chile existen empresas que manejan este tipo de «recompensas para obtener seguidores», ¿es un modelo efectivo»?
-«En ciertos casos funciona para un grupo limitado. Mi apreciación es que la gente debe crear cosas. Es lo mismo que ocurrió con Facebook hace dos años atrás cuando cambiaron sus políticas en las condiciones de uso. La gente comenzó a reclamar y crearon un grupo con propuestas con nuevas condiciones. Luego, Facebook tuvo que replantear su reglamentación de acuerdo a los aportes de los usuarios. Cuando la gente ve que lo que dice produce cambios en el gobierno, en las leyes y otras materias existirá una motivación extra para potenciar la participación en las redes».
– Frente a esto, ¿los Gobiernos deben adaptarse a los nuevos cambios comunicacionales?
– «Es mucho más sano que los gobiernos tengan conversaciones con la gente a través de Facebook o las redes sociales en vez de que ellos salgan a protestar a la calle. Existen excepciones, obviamente, porque es demasiado democrático, muy transparente y muy incómodo para los que no están en sintonía con las redes sociales. Tal es el caso de China o Corea del Norte. Son dos países que bloquearon Facebook y manejan sus propias redes porque tienen miedo de que estos medios alteren a la sociedad porque consideran que las redes son antigobiernos».
– ¿Es lo mismo que pasó con Barack Obama?
-«En el caso de Obama, el Presidente ocupó en su campaña el 2008 una red propia (http://www.barackobama.com) para lograr su objetivo de llegar al mando. Ahora, para el 2012, no vale la pena crear algo nuevo, sino que conversar con los casi 15 millones de seguidores que tiene en Facebook. Los estudios muestran que los usuarios que interactúan con los políticos en las redes sociales son más propensos a simpatizar por él y, además, darle su voto.
La participación de los medios de comunicación
El especialista y «fundador de la captología» -ciencia que se dedica a estudiar el cambio de las conductas humanas a través de las redes sociales- aprovechó la instancia para conversar, además, de los medios de comunicación y su rol dentro de la interacción con los usuarios.
El manejo de las redes sociales en los medios de comunicación está aún en pañales. Las estrategias aplicadas para captar a los usuarios son múltiples y algunas tienen efectos completamente distintos respecto al comportamiento de la gente. Es por eso que Daniel Berdichevsky fue enfático en aclarar que no existe una receta para cautivar a los lectores, pero hay que estar con los usuarios.
«No hay una fórmula para los medios que quieren tener redes sociales. Lo primero que se debe responder es cuál es el objetivo de contar con una estrategia en social media. Lo importante es conversar con la gente y no necesariamente publicar noticias por publicar. Sino que la gente comente y se exprese frente a los temas para tener un «barómetro» de los tópicos que más interesan a los usuarios», recalcó el investigador de Stanford.
Además, y para finalizar, recalcó que «no todo se basa en ocupar los clicks de los usuarios en términos comerciales. La gente también tiene sentimientos y en algunas ocasiones no están guiándose por eso, sino más bien, por las tendencias del mismo click».